Germinados

Cocina con germinados

GERMINADOS

¿Eres un fanático de la comida sana y del mínimo esfuerzo?

Te interesa conocer esto:

Descubre la formula, más cómoda, sencilla y económica, de preparar una alimentación super completa.
Se trata de los GERMINADOS.
Las semillas ya germinadas, contienen 100 veces más encimas que la propia semilla y aumenta hasta diez veces su valor nutricional.
Pueden hacerse germinar: Cereales, legumbres y oleaginosas.
Los germinados de avena, por ejemplo, contienen un 600% más de vitamina C que la propia avena.

¿QUE NOS APORTAN LOS GERMINADOS?

Los germinados son un alimento «vivo», que aporta grandes beneficios al organismo:

Encimas: son catalizadores de nutrientes, esenciales para la digestión de grasas, proteínas e hidratos de carbono, que contienen los alimentos que nos comemos. Las encimas desarrollan reacciones químicas que ayudan a que tu cuerpo absorba correctamente estos nutrientes. Contribuirán al suministro de energía, a neutralizar las toxinas, a la limpieza y regeneración celular. Pura calidad de vida.

Clorofila: Purifica la sangre, aporta energía, previene enfermedades.

Aminoácidos: Esenciales para que el cuerpo pueda generar la proteína completa.

Minerales: Hierro, calcio, magnesio, selenio, fosforo, zinc, B12, etc… Indispensables.

Oligoelementos: Son componentes químicos necesarios para que el organismo funcione perfectamente, contribuyen a la correcta renovación de las células. Su poderoso proceso inductor e inmunomodulador activa todo el sistema de defensas de nuestro organismo.

Algunos ejemplos:
Los germinados de trigo, garbanzos, lentejas y alubias son excelentes fuentes de vitamina C. La soja germinada tiene un 100% más de vitamina C que sin germinar.
Los germinados de alfalfa tienen más betacarotenos que el tomate y que el pimiento verde.
En los germinados de girasol, trigo, alfalfa, centeno y sésamo, abundan las vitaminas del grupo B: la
timina o vitamina B1, la riboflavina o vitamina B2 y la niacina.
El trigo germinado tiene 3 veces más vitamina E que el resto de los alimentos, llegando a ser un gran antioxidante celular, protector del corazón.
La alfalfa germinada contiene abundante vitamina K, con propiedades anticoagulantes.
El germinado de sésamo, sobre todo, contiene calcio.
Además el de sésamo, junto con el fenígeno, la soja roja y verde, contienen hierro.
Los brotes de: almendra, sésamo, girasol, soja, judías, son una fuente de potasio, más que muchas frutas y verduras.
El berro germinado, contiene magnesio y los de avena Silicio.

¿QUE PODEMOS GERMINAR?

Podemos llegar a germinar la gran mayoría de semillas, a excepción de las que tienen una cascara dura, como por ejemplo la de algunos frutales cómo el melocotón. En estos casos tendrás que romper la cascara protectora.

Algunas de las semillas que suelen germinarse son:

De legumbres: Como la soja, la alfalfa, las lentejas, los garbanzos, las judías, los guisantes, cacahuetes y el fenogreco.
De cereales: Como El trigo, la avena, el centeno, la cebada, la quinoa, la espelta, alforjón y también el mijo.
De plantas oleaginosas: Como el sésamo, el girasol, el lino, las almendras y la canola.
Verduras y hortalizas: Coles, calabazas, col rizada, coliflor, brócoli, rábano, amaranto, berro, puerro, apio, cebolla, rúcula, rábano, y, además, trébol.
Semillas de especias: Como el anís, coriandro, hinojo, ajo, albahaca, eneldo, mostaza y cáñamo.

Qué se puede germinar

VENTAJAS DE LOS GERMINADOS

Los germinados, nos ofrecen una alimentación muy completa y exento de grasas.
Germinando nuestros propios alimentos, tenemos un mayor control de su origen y asegurarnos de que sean más sanos
Resultan de fácil absorción para nuestro aparato digestivo. Muy indicados para personas con problemas digestivos, gastritis, úlceras e incluso con problemas intestinales, porque sus encimas favorecen la digestión.
Son un potentes antioxidantes, limpiando y regenerando cada célula de nuestro cuerpo. Sus efectos alcalinizantes regulan el ácido.
Reducen el colesterol «malo».
Tonifican el sistema nervioso.
Contribuyen a la mejora de la elasticidad de nuestras arterias.
Están indicados en los casos de anemia, gracias a la capacidad de regenerar células sanguíneas de su clorofila.
Entre todas sus propiedades, los germinados, contribuyen a retrasar el proceso del envejecimiento.

GERMINADOS PARA ALIMENTACIÓN DE ANIMALES

Además de la preparación de exquisitas ensaladas o para acompañar a infinidad de platos, potenciando su aporte nutricional, no hay que olvidar la alimentación animal.
También a nuestros amigos, los perros y los gatos, pueden aprovecharse del consumo de germinados como: la alfalfa, brócoli, coliflor, kale, girasol, trébol y lino. Tampoco hay que pasarse en las cantidades, ya que el exceso de germinados, podrían llegar a causarles algunos problemas gastrointestinales.
Bastará con añadir a su dieta diaria, entre una cucharada de las de café (para los animales más pequeños), hasta una y media sopera (para los más grandes).
No vamos a olvidarnos tampoco de los caballos, cuyo sistema digestivo puede aprovecharse de los aportes nutricionales que ofrecen germinados como la cebada, avena, alfalfa y la soja.
De todas formas, siempre es conveniente consultar con el veterinario, que nos recomendara los tipos de germinados que más puede convenir a cada caballo, atendiendo de: sus necesidades metabólicas, disciplina, nivel de entrenamiento, edad, estado fisiológico y condición corporal.

GERMINADOS PARA EL CULTIVO

Si queremos plantar y cultivar cualquier semilla, la germinación previa nos permite asegurar su crecimiento inicial.

INCONVENIENTES DE LOS GERMINADOS

Los cereales germinados pueden contener algo de gluten.
Tienen que tenerlo en cuenta los celiacos.
También pueden contener bacterias que se desarrollen con la misma temperatura y humedad que los propios germinados. En consecuencia, como con todos los alimentos, hay que mantener las medidas de higiene oportunas y procurar proveerse de fuentes fiables. Para personas bajas de defensas, como podrían ser: Ancianos, niños o mujeres embarazadas, cómo medida de precaución, seria conveniente cocer ligeramente los germinados, antes de consumirlos.

CÓMO CONSUMIR NUESTROS GERMINADOS

Siendo alimentos vivos, aprovecharemos más sus aportes nutricionales, comiéndolos normalmente crudos, o muy poco cocidos.
Son ideales para complementar ensaladas o añadiéndolos a cualquier cocinado, en el último momento, como podría ser: arroces, pasta, cous cous, polenta, pizzas , carnes, pescados…
También se pueden consumir solos, con algún aliño.
Licuados, teniendo en cuenta que muchos, al triturarlos, desprenden todo su potencial sabor y pueden resultar entre picante y muy picante.
Un excelente complemento en sopas frías de verduras.
Hay montones de recetas para hacer con germinados.

CÓMO PODEMOS PREPARAR LOS GERMINADOS

Gracias a nuestra germinadora, este paso es lo mas sencillo de todo.
Se germina siempre en crudo.
No conviene que le den la luz mientras están germinando.
Se colocan las semillas y el agua, se enchufa y el sólo se encarga de aportar la humedad necesaria y
crear la temperatura adecuada, para la germinación.
Cuando están germinadas las semillas, sólo queda decir:

Buen provecho y excelente Saluditis!!!